¿Qué es la corrección ortotipográfica?
¿Qué es la corrección ortotipográfica?
Cada vez que alguien me pregunta a qué me dedico y le contesto que soy correctora ortotipográfica y de estilo de textos, la reacción inmediata suele oscilar entre alguna de estas opciones:
- Cara de extrañeza mientras se intenta descifrar el idioma en el que le estoy hablando.
- Mirada suplicante que reclama una explicación antes de que el cerebro entre en colapso.
- ¿Ortotipoqué?
Pues bien, en este artículo os cuento en qué consiste exactamente la corrección ortotipográfica de textos, de qué se encarga un corrector ortotipográfico y cuáles son las tareas que no le competen.
¿Qué es la ortotipografía?
Si buscamos en el Diccionario de la Real Academia Española la palabra «ortotipografía» vemos que significa ‘conjunto de usos y convenciones particulares por las que se rige en cada lengua la escritura mediante signos tipográficos’, y que es una palabra nacida de la unión de orto- (‘recto’, ‘correcto’) y tipografía (‘clase de tipos de imprenta’).
Hay que remontarse al siglo XV para poder entender qué es eso de los tipos. El alemán Gutenberg creó la primera imprenta moderna con tipos móviles mecánicos, que eran conjuntos de piezas metálicas con las que se componían los textos que posteriormente se entintaban para poder imprimir. A medida que se extendió el uso de la imprenta, se fueron creando nuevos estilos de tipos, o lo que es lo mismo, clases de letras.
Aquí enlazo un vídeo en el que se ven los tipos (cada una de las piezas de plomo que representa una letra) y cómo se componen los textos:
Por tanto, podríamos decir que la ortotipografía, en el sentido más estricto de la palabra, es el correcto uso de esas clases de tipos para la composición de textos. Aunque hoy en día la ortotipografía va más allá y se encarga de otras labores, ya que la evolución misma de los mecanismos de impresión, composición y creación de los textos ha cambiado.
Pero también podría verse desde otro punto de vista. Teniendo en cuenta su aplicación en la actualidad, podríamos considerar que «ortotipografía» representa la unión entre la ortografía y la tipografía. Y a estas alturas puede que te estés preguntando: «pero, ¿qué hace realmente un corrector ortotipográfico?».
¿Qué hace la corrección ortotipográfica?
La corrección ortotipográfica, como acabamos de ver, hace referencia a la ortografía (‘conjunto de normas que regulan la escritura de una lengua’) y a la tipográfica. Por tanto, el corrector debe verificar si en el texto se han utilizado de manera apropiada los elementos tipográficos (cursiva, versalita, negrita, subrayado, sangría, espacio, interlineado, etc.) y, si es necesario, que se han respetado las normas de estilo y código tipográfico del cliente.
Sin embargo, no solo se encarga de esto, sino que además el corrector deberá corregir las erratas y las faltas de ortografía.
En resumen, la corrección ortotipográfica es el proceso mediante el cual:
- Se corrigen los errores ortográficos y de puntuación.
- Se ajusta la ortografía a las normas de la lengua y a las regulaciones internacionales.
- El corrector aplica sus conocimientos sobre costumbres y usos tipográficos en los asuntos no regidos por normas ni directrices. Además, determinará qué le va mejor a cada texto.
- Se comprueba que se siguen los criterios del libro de estilo o del editor en todo aquello no sujeto a normas estrictas: uso de mayúsculas, formación de abreviaturas, escritura de cantidades, puntuación de diálogos en narrativa, espaciado entre símbolos, uso de negrita, cursiva y comillas, etc.
- Se unifica el estilo del texto.
- Se supervisa la fidelidad de las referencias cruzadas.
¿Qué no le corresponde a un corrector ortotipográfico?
Aunque algunos crean que un corrector también tiene algo de redactor, no deben confundirse estas dos labores. El corrector ortotipográfico no es quien escribe el texto, sino quien lo revaloriza retocando todos los errores y le saca el mayor partido desde el punto de vista ortográfico y tipográfico.
Así pues, no es cosa de un corrector ortotipográfico:
- La redacción y/o reescritura del texto.
- La creación de índices.
- La maquetación íntegra del documento.
- Comprobar datos o la veracidad del texto, así como verificar referencias, alusiones, citas y bibliografía.
- Revisar la fidelidad o la calidad de una traducción.
- La reordenación de ideas y contenidos.
- Asesorar sobre estrategias de comunicación.
- Cambiar el estilo propio del autor.
¿Cuáles son los beneficios de la corrección?
Nuestra sociedad ve con malos ojos que alguien venga a corregir nuestros errores. Nos sentimos atacados o infravalorados cuando nos hacen ver alguno de nuestros fallos. Pero esto no debería ser así.
Cuando tu coche se avería, lo llevas a un taller para que te ayuden a arreglarlo (no piensas que el mecánico se ríe de ti por no saber arreglarlo tú). Cuando un enchufe se estropea, llamas al electricista (seguro que no se burla de ti porque no seas un manitas). Cuando necesitas posicionar tu negocio en internet, buscas a un community manager o a un profesional SEO (sabes que su trabajo te ayuda a revalorizar tu negocio).
Del mismo modo, el corrector es un profesional que trabaja para ayudar al cliente. Por eso, cuando escribes un texto, el corrector te ayuda a solucionar los posibles errores, sin jactarse y sin disfrutar maliciosamente descubriendo tus despistes. El corrector disfruta de verdad ayudando a sacar brillo a la creación de otra persona.
Nuestra sociedad ve con malos ojos que alguien venga a corregir nuestros errores. Nos sentimos atacados o infravalorados cuando nos hacen ver alguno de nuestros fallos. Pero esto no debería ser así.
Cuando tu coche se avería, lo llevas a un taller para que te ayuden a arreglarlo (no piensas que el mecánico se ríe de ti por no saber arreglarlo tú). Cuando un enchufe se estropea, llamas al electricista (seguro que no se burla de ti porque no seas un manitas).Cuando necesitas posicionar tu
negocio en internet, buscas a un community manager o a un profesional SEO (sabes que su trabajo te ayuda a revalorizar tu negocio).
Del mismo modo, el corrector es un profesional que trabaja para ayudar al cliente. Por eso, cuando escribes un texto, el corrector te ayuda a solucionar los posibles errores, sin jactarse y sin disfrutar maliciosamente descubriendo tus despistes. El corrector disfruta de verdad ayudando a sacar brillo a la creación de otra persona.
Gracias a la corrección se pueden utilizar los textos (todos se crean para algún determinado fin y con un propósito) con la tranquilidad de que ningún error dañará su contenido y su esencia. La corrección es un valor añadido al potencial de un texto y permite a su creador conseguir sus objetivos sin dudas ni preocupaciones.



